¿Qué es la Enfermedad de Lyme?

Cuando hablamos de Enfermedad de Lyme en humanos, nos referimos a una patología multi-infecciosa y multiorgánica normalmente transmitida por la picadura de una garrapata que esté infectada con la bacteria Borrelia burgdorferi. Aunque la garrapata es el origen más habitual, también pueden transmisores mosquitos, pulgas u otros insectos infectados por la bacteria.

Se trata de la enfermedad más frecuente transmitida por la picadura de garrapata y su incidencia crece año tras año. La Comisión Europea ha alertado a los Estados Miembros de la unión sobre este hecho y advierte sobre la necesidad de avanzar en su diagnóstico y en la especialización del tratamiento, ya que las pruebas diagnósticas habituales son negativas en el 80% de los casos y esto impide que los pacientes reciban el tratamiento necesario.

Por su complejidad, la Enfermedad de Lyme está considerada como una patología difícil de diagnosticar y, sin un tratamiento adecuado, sus consecuencias de su cronificación pueden ser irreversibles.

Afortunadamente, hoy en día existen centros altamente especializados en el diagnóstico y tratamiento de la Enfermedad de Lyme y en los últimos años se ha avanzado enormemente gracias a la aplicación de técnicas muy innovadoras.

 

Diagnóstico de la Enfermedad de Lyme 

Tal y como señala la Comisión Europea, el diagnóstico certero de la Enfermedad de Lyme requiere de una alta especialización, ya que esta enfermedad presenta síntomas que suelen imitar a otras enfermedades crónicas y requiere pruebas muy especializadas que detecten la presencia de la bacteria en el organismo.

El Lyme crónico, debido a la posible multi-infección en múltiples órganos del paciente, requiere de tratamientos especializados totalmente diseñados a la medida de cada paciente y que se adapten a su grado de afección.